“Carlos Hernández fue una figura muy influyente e importante en la sociedad benalmadense, no sólo por ser uno de los artífices del Colegio Maravillas, sino también por su aportación al deporte y a la cultura”, ha destacado el alcalde de Benalmádena, Víctor Navas
El nombramiento de Carlos Hernández, presidente de AD Maravillas y uno de los fundadores del Colegio Maravillas, como Hijo Adoptivo de Benalmádena, ha contado esta mañana con el respaldo unánime de todos los concejales de la Corporación, que han votado a favor de la distinción durante el pleno ordinario de septiembre.
“Hoy proponemos su nombramiento como Hijo Adoptivo de Benalmádena por su notable contribución a la sociedad benalmadense en los ámbitos docente, cultural y deportivo”, ha destacado el concejal de Régimen Interno, Sergio Torralvo, que ha sido el encargado de dar lectura a la moción del equipo de gobierno, como antiguo alumno del Colegio Maravillas.
Carlos Hernández García, fallecido en Benalmádena el pasado 10 de abril, había nacido en Madrid un 14 de julio y tras sus estudios de Magisterio y posteriormente Filosofía y Letras en la rama de Lengua y Literatura, se estableció en Benalmádena en 1973 para trabajar en el Colegio Maravillas, entonces en sus inicios como profesor.
Cuando sobrevino la crisis en el Colegio Maravillas en el verano de 1975, los entonces propietarios ofrecieron a los trabajadores constituirse en cooperativa y hacerse cargo del mismo. Aunque la iniciativa no fructificó, unos valientes -entre los que se encontraba Carlos Hernández- hicieron frente a la situación y se subrogaron en el activo y pasivo de la sociedad. Ese sería su primer gran mérito.
Volcado en levantar el prestigio del colegio, se sacrificó junto a sus socios en trabajo y economía durante muchos años hasta que hicieron del colegio un referente a nivel provincial, para orgullo de nuestro municipio.
A lo largo de los años son muchos los acontecimientos que ha promovido o apoyado, contribuyendo a difundir el nombre de Benalmádena. Primero fue el convenio suscrito con la Universidad de Málaga para organizar los cursos de verano de español para extranjeros, que dieron un gran valor al municipio a nivel internacional. El éxito de estos cursos supuso el nacimiento de la Escuela de Idiomas Maravillas, que hoy ya en manos de otro de sus socios, sigue paseando el nombre de Benalmádena por Europa, Asia y América.
Después, y sin descuidar sus labores como enseñante y administrador del Colegio -en cuya tarea se labró un buen nombre por honradez y seriedad en el cumplimiento de sus obligaciones con padres y proveedores-, vinieron otras ideas, dirigidas una vez más a promocionar la excelencia educativa y el nombre de nuestro pueblo:
Fue Presidente hasta que nos dejó de la Asociación Deportiva Maravillas Benalmádena, que pasea su nombre por toda España triunfando con el Balonmano y trayendo al municipio multitud de títulos y trofeos, que se pueden admirar hoy en las vitrinas de sus instalaciones. Entre los logros deportivos del A. D. Maravillas se encuentran la clasificación como terceras de España del Infantil Femenino, la permanencia en 1º Nacional del Seniors Masculino o la proclamación como campeones de Málaga tanto del Alevín Femenino como del Juvenil Masculino.
Se volcó al máximo en la creación y apoyo continuado de la Asociación ALEZEIATEATRO, para promocionar el teatro clásico escolar. Esta asociación ha llevado de nuevo el nombre de Benalmádena como sinónimo de Cultura, por toda la geografía española, peninsular e insular, con grandes premios y reconocimientos, también exhibidos en las instalaciones del centro.
Y, por último, en su faceta de escritor, participó en la vida cultural de Benalmádena contribuyendo con varios relatos al concurso promovido por la Concejalía de Cultura, El vigía de la costa, en el que obtuvo dos premios.
Don Carlos Hernández, además de los hechos mencionados, que justificarían su nombramiento como hijo predilecto, deja otro legado no tangible o mesurable y no menos meritorio: una huella imborrable en el corazón de miles de alumnos que le honraron multitudinariamente en su despedida.
“Carlos Hernández fue una figura muy influyente e importante en la sociedad benalmadense, no sólo por ser uno de los artífices del Colegio Maravillas, sino también por su aportación al deporte, que ha permitido al Maravillas ser una referencia del balonmano a nivel nacional; y a la cultura, impulsando la creación de Alezeia Teatro, una de las compañías más prestigiosas del ámbito académico andaluz”, ha destacado Navas.