Benalmádena 11/9/2011 – La empresa Automóviles Portillo ha comunicado al Ayuntamiento de Benalmádena que a partir de mañana suspenderá en el municipio el servivcio de la línea circular de autobuses. Esta línea, que entró en vigor en Julio de 2010 por acuerdo entre la empresa y el anterior equipo de Gobierno, ha supuesto un incremento de 126.000 euros en la deuda que tiene el Ayuntamiento con Portillo. Los datos nos muestran que la diferencia entre la línea L2 y la circular puesta en marcha por la anterior Corporación es importante. Mientras la circular tiene un coste por viajero de 18,74 € por usuario, la L2 es de 1,20 € por viajero.
La empresa Portillo justifica la suspensión de la línea circular porque tras un año de funcionamiento, el número de viajeros es escaso y además el Ayuntamiento no ha abonado el coste generado. Artacho, ha informado que la delegación de Transporte ha puesto en marcha un estudio y negociación con la empresa Portillo para aplazar la deuda y desarrollar una nueva estructura del transporte urbano en Benalmádena.
Artacho ha calificado como “desastrosa” la gestión llevada a cabo por el anterior Gobierno Municipal. “La apuesta de Enrique Moya por la línea circular solo ha conseguido incrementar la deuda con Portillo, que actualmente ronda los dos millones de euros”, ha recordado.
Como condición, el Ayuntamiento ha puesto encima de la mesa, que para continuar con la negociación, Portillo deberá mantener la línea L2 en su actual configuración, puesto que da un servicio indispensable para unos 14.000 viajeros mensuales. Artacho anuncia “una nueva reestructuración de líneas para que el servicio ahora perdido quede cubierto, al menos en gran medida, con la combinación de líneas urbanas e interurbanas”.
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