Parte de el equipo de gobierno ha visitado este viernes los trabajos que se están llevando a cabo para trasplantar un algarrobo bicentenario ubicado en Camino de Amocafre hacia la nueva rotonda de García Lorca.
Desde el Ayuntamiento recuerdan que este árbol estaba haciendo “mucho daño” a infraestructuras de la zona, “como una piscina, muros y el propio asfalto”. “Con estos trabajos, hemos dado respuesta a una petición vecinal que, desde hace varios años, no había sido atendida por el gobierno anterior , concretamente, desde 2020”, ha explicado el alcalde.
El primer edil ha agradecido a la familia Ramírez porque “ha aguantado mucho” y este árbol “tan singular y antiguo, con mucho sentimiento, está ahora en el municipio para que lo puedan disfrutar todos aquellos que pasen por esta zona”.
El algarrobo en cuestión, es un árbol bicentenario de un vecino particular, del que se estima podría tener como mínimo unos 300 años. El árbol “estaba afectando a un domicilio y esta familia se dirigió al Ayuntamiento hace ya varios para reclamar permiso para talarlo”, ha explicado Olea.
Así, el Ayuntamiento ha trasplantado este ejemplar por su gran valor en una operación que ha sido supervisada por los técnicos para garantizar la supervivencia del árbol. Desde Parques y Jardines, en coordinación con la empresa concesionaria, está trabajando en la conservación y aplicación de una serie de tratamientos especiales para garantizar la supervivencia del ejemplar, que cuenta con un porte importante y que formará parte del catálogo municipal de arbolado de especial interés.