La presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, y la presidenta del Senado, Pilar Llop, han recibido hoy al alcalde de Torremolinos, José Ortiz, y al presidente de la asociación Pasaje Begoña, Jorge Pérez, con motivo del 50 aniversario de la gran redada que tuvo lugar en la localidad. Un encuentro que se enmarca dentro de una amplia agenda de actos para reivindicar la memoria y derechos del colectivo LGTBI y que coincide con el Día Internacional del Orgullo LGTBIQ+.
“A pesar de los avances seguimos siendo un refugio para otros países y pueblos muy pequeños de los cuales vienen a Torremolinos para expresar cómo sienten y cómo aman porque no hay libertad para progresar. Planteamos una labor educativa en los próximos años en los centros escolares, institutos y especialmente en los pueblos, un lugar donde hace falta esa visibilidad”, ha explicado el alcalde en su intervención en el Congreso.
Asimismo, ha referido la creación de una red estatal de “Municipios orgullosos” para “avanzar” en la senda del progreso ante las situación de ocultación que viven en el entorno familiar, profesional y escolar. “Este país ha avanzado mucho pero seguimos siendo un refugio y hay que trasladarlo a la Unión Europea por la situación que viven algunos países que intentan que la UE no refleje esa libertad”, ha sentenciado.
En presencia del director adjunto del Gabinete de la Presidenta, Eduard Roig, el director ejecutivo de la Fundación Pedro Zerolo, Miguel Ángel Fernández García, la delegada de la Consejería Igualdad en Sevilla, Ana González, o la directora general de Igualdad del Ayuntamiento de Sevilla, Teresa García, entre otras personalidades, el presidente de la asociación Pasaje Begoña, Jorge Pérez, ha calificado el encuentro como “una oportunidad única” y ha advertido: “Estamos mejor, no cabe duda, pero no podemos descuidarnos”, en referencia a continuar en la lucha por los derechos del colectivo LGTBI.
Por último, el encuentro lo ha cerrado la testigo del Pasaje Begoña en representación de todas las personas que sufrieron represión, Manuela Saborido, también conocida como Manolita Chen quien cuenta con una fundación con su nombre para luchar por los derechos del colectivo. “Muchísimas gracias por el amor recibido estos días, quién me lo iba a decir. Vengo en representación de las se han ido arriba despreciadas y humilladas y le pido presidenta que luche por nosotras, que nos queda un poquito”
Ha continuado: “Yo he sido vejada, pegada, he tomado aceite de resina, me han metido en la cárcel, me han dado palos en la barriga y he echado sangre por la boca y después han venido a decirme hazme esto. Hubo violaciones y vengo en representación de todas ellas para decir que sigo luchando”.