El centro educativo EADE convocó el pasado lunes a los medios de comunicación para anunciar que ha presentado a la Junta de Andalucía la solicitud oficial para que el Parlamento Andaluz reconozca la Universidad Privada de la Costa del Sol.
La Universidad Privada de la Costa del Sol sería la primera y única universidad privada reconocida en Málaga para ofertar enseñanzas conducentes a titulaciones oficiales españolas.
La única reconocida hasta el momento en Andalucía es la Universidad Loyola, con sedes en Córdoba y Sevilla, promovida por la Compañía de Jesús. Los promotores de la nueva Universidad Privada de la Costa del Sol subrayan su origen malagueño y su carácter laico, aconfesional y plural, así como su compromiso efectivo con la ciudad, habiendo reinvertido sus beneficios desde sus inicios en su proyecto educativo en su campus en Pedregalejo, generando empleo directo en las distintas empresas del grupo a casi 200 trabajadores.
EADE sostiene la necesidad de que Málaga pueda complementar la oferta de la universidad pública con una oferta privada, que satisfaga la demanda de los miles de alumnos andaluces que deben salir de la Comunidad para estudiar en universidades privadas. EADE ha calculado que esta sangría de recursos económicos hacia otras Comunidades puede rondar los 50 millones de euros anuales, y va de la mano de la fuga de cerebros, el desarraigo de profesionales y la pérdida de capital humano. La solicitud presentada aporta datos que avalan que la creación de una nueva universidad privada supone la generación de un número importante de puestos de trabajo de elevada cualificación profesional y un revulsivo económico para la región donde se ubica.
Si estos recursos, además, son reinvertidos en el mismo territorio por una Universidad con vocación malagueña y andaluza, como es el caso de los promotores de la nueva Universidad, se genera un círculo virtuoso de prosperidad y desarrollo económico. El director de Estudios de EADE, Gabriel Arrabal, subraya la complementariedad con la universidad pública: “Tenemos una excelente relación con la Universidad de Málaga, hasta el punto de que firmamos con ella un Convenio de Adscripción hace tres años que está pendiente aún de autorización definitiva en Sevilla, y nuestra relación ha sido siempre de colaboración y lealtad, y así seguirá siendo, como hemos manifestado ayer mismo a su Rector”.