El concejal de Seguridad, Javier Marín; y el jefe de Policía Local de Benalmádena, Francisco Zamora, han realizado esta mañana balance del número de denuncias interpuestas durante 2020 por incumplimiento de las ordenanzas municipales.
“Llama la atención que, durante un año en el que la movilidad de las personas y la organización de actividades y eventos se vieron drásticamente reducidos a consecuencia de la pandemia, aumentaron el número de intervenciones por incumplimiento de las ordenanzas municipales: 886 frente a las 783 de 2019”, ha valorado Marín.
“Ese aumento no lo registró sólo la Unidad Delta, la que vela por el cumplimiento de las ordenanzas municipales, sino también el resto de la plantilla, y por ello quiero agradecer a todos los agentes que integran la Policía Local su esfuerzo para garantizar el cumplimiento de dichas ordenanzas, uno de los objetivos que nos hemos marcado porque consideramos que es una de las claves para lograr una buena convivencia ciudadana”, ha apuntado el concejal.
“También quiero agradecerles su valiosa contribución en ayudar a las autoridades sanitarias en el cumplimiento de las medidas de distanciamiento social y otras normas de prevención ante el covid”, ha recalcado.
“Por ello es fundamental que toda la Policía Local, no solamente la Unidad Delta, ponga especial atención en velar por el cumplimiento de las ordenanzas municipales”, ha subrayado.
Dentro de todas las denuncias interpuestas durante 2020 por incumplimiento de las ordenanzas, donde se ha producido un mayor aumento es en las relativas a la convivencia ciudadana, con un total de 340 sanciones frente a las 162 puestas en 2019. Le siguen las puestas por incumplir las normas relativas a la posesión de animales domésticos: un total de 295 denuncias frente a las 244 puestas en 2019. En tercer lugar, estarían las vinculadas al urbanismo: 84, registrando en este caso un descenso respecto a 2019, año en el que se pusieron 122 denuncias por este aspecto.
“Las denuncias relacionadas con actividades en la calle han tenido un descenso significativo a causa de la pandemia”, ha apuntado.
Dentro de las denuncias interpuestas por incumplimiento de las ordenanzas municipales de convivencia ciudadana, que son las más numerosas (340), el abandono de muebles y otros enseres en la vía pública fuera del horario de recogida establecido vuelve a ser la falta más frecuente, acaparando 108 de las 340 denuncias. Le siguen el depósito de podas en la vía pública (76) y las molestias vecinales (53). Por dejar basura orgánica fuera del contenedor o del horario establecido para ello se interpusieron 33 sanciones.
“Quiero contribuir a concienciar a la población en la importancia de cumplir las ordenanzas sobre depósito de residuos: una sanción por este aspecto puede llegar a ascender a 700 euros”, ha advertido.
En cuanto a las denuncias vinculadas a animales domésticos, el concejal ha manifestado su preocupación por el hecho de que se interpusieron 114 a propietarios de perros potencialmente peligrosos que carecían de la documentación en regla. “Nos inquieta que los propietarios de perros potencialmente peligrosos carezcan de una formación adecuada para tenerlos, por el peligro que puede entrañar para el resto de la población”, ha avisado.
“Quiero también destacar las 78 denuncias más que en 2019 puestas por toda la plantilla no adscrita a la Unidad Delta por incumplimiento de las ordenanzas; son fruto de la concienciación de todos los agentes que integran la Policía Local de Benalmádena”, ha destacado.
Aparte del número de denuncias, el concejal ha resaltado el notable incremento de las incidencias atendidas por la Policía Local en horario nocturno durante 2020: 1.034 frente a las 550 de 2019. “En este sentido, sobre todo se han registrado muchas incidencias durante los últimos meses a causa de los avisos de vecinos por la organización de fiestas en domicilios particulares en los que se sobrepasaba el nivel de ruido permitido, o el aforo autorizado durante este periodo de pandemia”, ha explicado Marín.
Por su parte, Francisco Zamora ha recalcado que el cumplimiento de las ordenanzas municipales “marca el nivel de convivencia y de calidad de vida en nuestra localidad”.
“Al sancionar por incumplir las ordenanzas, la Policía Local recuerda a los afortunadamente escasos ciudadanos que no las cumplen que están perjudicando con esa actitud a la buena convivencia”, ha apuntado.
“El descenso de las actividades recreativas con motivo del adelantamiento de los horarios de cierre de los comercios y zonas de ocio nos ha permitido reforzar la atención a otras incidencias importantes, cuyo índice de control ha subido mucho durante este último año”, ha añadido Zamora.